München de La Rioja

  Como a todo el mundo que pretendía volar en Europa, a nosotros también nos ha afectado la nube volcánica:

Nosotros teníamos billete para volar a Múnich el viernes pasado a las 19:45. A las ocho aún ponía en las pantallas que el vuelo salía según previsión. Consultábamos la página web de AENA y de Iberia y en ambas ponía que salía el vuelo. Así seguimos hasta las nueve, cuando conseguimos que un empleado que pasaba por allí nos confirmase que estaba cancelado desde hacía dos horas mientras que las pantallas decían que seguía según planificación.
En un cónclave de emergencia, decidimos que viajábamos de todas maneras. Nos planteamos varios destinos y al final elegimos ir a La Rioja a conocer, entre otras cosas, el pueblo de Cañas, que teníamos pendiente desde hace tiempo.
Cogimos los coches que estaban más cerca del aeropuerto y nos pusimos en marcha. Para que no se nos hiciese muy tarde, pasamos la primera noche en Aranda de Duero, a unos 150 km de Madrid. Como César llevaba el portátil con conexión a Internet, fuimos reservando el alojamiento por el camino.
   Después de comer el correspondiente asado de cordero, seguimos camino. Tomamos posesión de la casa rural que teníamos en Cañas (al lado de Santo Domingo de La Calzada) y nos fuimos Logroño de tapas a la calle Laurel.
   El Domingo visitamos la abadía benedictina de Cañas (para mí fue una sorpresa que hubiese allí tal cosa).
Comimos en San Millán de La Cogolla (muy bien, por cierto) y visitamos los monasterios de Yuso y Suso, donde aparecieron los primeros escritos en lengua española y vasca. El monasterio de Yuso es el que está en la parte baja de la montaña y es más moderno (del siglo XVIII) mientras que el de Suso, el  de la foto, está casi en la cima y es más antiguo.
   Ayer lunes visitamos Santo Domingo y nos pusimos de camino de vuelta haciendo parada en Nájera (donde comimos) y Lerma. Así que al final aún sin vuelos, hicimos un viaje bastante completo.