domingo, 30 de mayo de 2010

Puesta al día: Un mayo muy ajetreado

Llevo mucho tiempo sin escribir y no es porque no tenga  nada que contar. Más bien al contrario. No he tenido ningún fin de semana sin evento y se me han acumulado viajes y fiestas.
     El 1 de mayo fue el bautizo de Vega. Estaba guapísima pero, desgraciadamente, no tengo aún fotos de ese día. En la ceremonia, celebrada por Rosendo, se portó muy bien. No protestó nada. Lía también estuvo muy atenta y ayudó mucho con la liturgia. La comida, en un pazo cerca de Eirís, fue espectacular. Par completarlo, el día estuvo muy bonito.
     El día 8 fue la boda de Jaimilli y Olga en Navacerrada. Lo pasamos genial. Yo creo que estábamos muy guapos todos y hasta acabé bailando muiñeiras y otros bailes con la madre de Olga. Cenamos como señores y la fiesta duró horas y horas.
    Como el viernes 15 tuve una prueba que requería pasarme en vela la noche en vela y después ir a dormir 4 hora a una camilla en la Jiménez Díaz, vinieron mis padres a acompañarme y a compartir sacrificio. Aprovechando que el viernes no estaba en condiciones de trabajar, me fui con ellos a La Coruña y así pude ver a las niñas otra vez. Esta vez tengo foto sólo de Vega:


          El fin de semana pasado, el del 20, 21, 22 de mayo fue la boda de Íñigo y Amaia en Durango.
El santuario de Urkiola, donde se casaron, es un sitio precioso. También hizo un día estupendo.
  Después de comer muy abundántemente y cosas muy ricas, estuvimos un buen rato de baile en el Gran Hotel Durango. Al acabar, aún fuimos un rato a la calle de marcha de Durango; Goyenkallen (no creo que se escriba así).

       Para rematar el mes, ayer día 29 fue la boda de Pedrito y Mónica en El Molar. Se casaron allí mismo , en Monteviejo y salíó todo muy bien.  Si repito que comí como un señor, pensareis que llevo un mesecito... lleno de banquetes. Así es, pero para empezar el próximo junio tendremos uno más. Ahora tocara la de Antonio y Luísa.